
Las fuerzas del mal están en continúa lucha, sólo una vez cada 100 años y con la ayuda de un amuleto mágico, uno de los bandos puede proclamarse vencedor. Drácula, Frankenstein, el hombre lobo, la momia y la criatura de la Laguna Negra pretenden conseguir ese amuleto y sólo "La pandilla del monstruo" puede detenerlos.



Una pandilla alucinante (The monster squad, 1987) es un sincero homenaje al viejo cine de monstruos y de serie b, enfocado al público juvenil. Es una película fruto de su tiempo, es fácil emparentarla con otras producciones de la misma época como Los Goonies (1985), Exploradores (1985) o El secreto de la pirámide (1985). Y es que la película tiene lo mejor de las dos influencias que la originaron, el entretenimiento y diversión del cine juvenil de los 80 y el gusto por un cine más clásico y artesanal como las producciones de monstruos de la Universal.

Su director, Fred Dekker, declaró que su intención a la hora de realizar la película era "The little Rascals conocen a los monstruos de la Universal" y esa es la sensación que transmite la película (aunque yo la habría definido como "Los Goonies conocen a los monstruos de la Universal"). The little Rascals era una popular serie de cortos que narraba con humor slapstick, las aventuras de un grupo de niños, acompañados por un perro (Petey), que tenían un club en el que no permitían la entrada a niñas. En Una pandilla alucinante tenemos a un grupo de niños, que tienen su base en la casa de un árbol, al que nunca dejan entrar a la hermana pequeña de Sean y también tenemos el personaje del perro, que curiosamente tiene un nombre similar (Pete).
Y de las películas de monstruos de la Universal tenemos a todos los monstruos clásicos, Drácula, Frankenstein, El hombre lobo, La momia y La criatura de la Laguna Negra. Esa idea de reunión de monstruos ya había sido utilizada en varias películas anteriormente, en títulos como Frankenstein y el hombre lobo (1943), La zíngara y los monstruos (1944), La mansión de Drácula (1945) y Abbott y Costello contra los fantasmas (1948). Con esta última guarda más de un parecido, ambas tienen un tratamiento cómico de la historia, además se reúnen a los principales monstruos clásicos (Drácula, Frankenstein y El hombre lobo en el caso de Abbott y Costello...), Drácula es el jefe del grupo, la forma de revivir a Frankenstein es similar y el hombre lobo cuando es humano intenta detener a los monstruos. Nunca se había reunido a todos los monstruos hasta la realización de Una pandilla alucinante, incluso se han acordado de las novias de Drácula y de Van Helsing (se nota que Stephen Sommers vio esta película).
Y de las películas de monstruos de la Universal tenemos a todos los monstruos clásicos, Drácula, Frankenstein, El hombre lobo, La momia y La criatura de la Laguna Negra. Esa idea de reunión de monstruos ya había sido utilizada en varias películas anteriormente, en títulos como Frankenstein y el hombre lobo (1943), La zíngara y los monstruos (1944), La mansión de Drácula (1945) y Abbott y Costello contra los fantasmas (1948). Con esta última guarda más de un parecido, ambas tienen un tratamiento cómico de la historia, además se reúnen a los principales monstruos clásicos (Drácula, Frankenstein y El hombre lobo en el caso de Abbott y Costello...), Drácula es el jefe del grupo, la forma de revivir a Frankenstein es similar y el hombre lobo cuando es humano intenta detener a los monstruos. Nunca se había reunido a todos los monstruos hasta la realización de Una pandilla alucinante, incluso se han acordado de las novias de Drácula y de Van Helsing (se nota que Stephen Sommers vio esta película).

Puede que los fans más acérrimos de los monstruos clásicos no vean con agrado ciertos cambios realizados en sus monstruos. Aunque algunos sean los de siempre, como Drácula, la momia o el hombre lobo, nos encontramos con una cierta infantilización de Frankenstein, algo por otro lado lógico de esperar dado la falta de maldad del personaje y que se trata de una película juvenil, pero la traslación del monstruo de la Laguna Negra convierte al personaje en un villano, cuando en las películas que había protagonizado era un personaje trágico, que fácilmente podría emparentarse con King Kong.

La película fue también la reunión de varias interesantes personalidades de Hollywood, en diferentes tareas podemos encontrar a Fred Dekker, Shane Black y Peter Hyams. Dekker, director de la película, siempre se ha movido dentro del género fantástico y de terror, un año antes de realizar Una pandilla alucinante realizo otro trabajo de nostalgia y diversión por la serie b, El terror llama a su puerta (1986), que con el tiempo y al igual que con la película que aquí nos ocupa, se ha convertido en una película de culto. Tras estas dos películas se refugió en la televisión trabajando en la serie Historias de la cripta (1989-1996), su último trabajo como director fue la decepcionante Robocop 3 (1993). Shane Black, responsable del guión junto a Dekker, es uno de los guionistas más importantes y comerciales de Hollywood, normalmente ligado a superproducciones guionizadas por él como Arma letal (1987), El último boy scout (1991) o Memoria letal (1996), debutó como director con la excelente Kiss kiss bang bang (2005). Peter Hyams es el productor ejecutivo de la película, aunque es más conocido por su labor como director, donde siempre ha demostrado un gusto por el género fantástico, realizando obras como Capricornio Uno (1978), Atmósfera cero (1981), 2010: Odisea 2 (1984), Permanezca en sintonía (1992) o The relic (1997).
Cabe destacar la labor en el apartado técnico, donde encontramos a dos genios de los efectos visuales, Stan Winston y Richard Edlund. El primero se encargó de crear las criaturas que protagonizan la película, destacan sobre todo su creación del Monstruo de la Laguna Negra y el maquillaje de Frankenstein. Winston pudo reinventar a su gusto el diseño de los monstruos porque la Universal no cedió los diseños de los personajes, esa es la razón por la que se notan diferencias con los diseños del Monstruo de la Laguna Negra, El hombre lobo y Frankenstein. Edlund por su parte creó los efectos visuales de la película como ese torbellino que envía a los monstruos al limbo o las transformaciones de Drácula. Aunque se utilizaron las técnicas más modernas de la época, vistas con el paso del tiempo, el uso de técnicas tan artesanales como miniaturas o matte paintings, no hacen más que conferirle un aire de lo más clásico a la película.
Cabe destacar la labor en el apartado técnico, donde encontramos a dos genios de los efectos visuales, Stan Winston y Richard Edlund. El primero se encargó de crear las criaturas que protagonizan la película, destacan sobre todo su creación del Monstruo de la Laguna Negra y el maquillaje de Frankenstein. Winston pudo reinventar a su gusto el diseño de los monstruos porque la Universal no cedió los diseños de los personajes, esa es la razón por la que se notan diferencias con los diseños del Monstruo de la Laguna Negra, El hombre lobo y Frankenstein. Edlund por su parte creó los efectos visuales de la película como ese torbellino que envía a los monstruos al limbo o las transformaciones de Drácula. Aunque se utilizaron las técnicas más modernas de la época, vistas con el paso del tiempo, el uso de técnicas tan artesanales como miniaturas o matte paintings, no hacen más que conferirle un aire de lo más clásico a la película.

Se nota por parte de sus responsables un gusto y cariño por el material que manejan, siempre con la mirada puesta en las películas y personajes que homenajean, apreciándose en detalles como la transformación de Drácula en vampiro visualizada a través de su sombra proyectada en una pared, la primera transformación del hombre lobo mostrada mediante encadenados, la idea de Drácula como un vampiro real de dos metros o esa memorable escena en la que todos los monstruos se reúnen para revivir a Frankenstein, todos esos momentos le confieren a la película un tono aun más nostálgico si cabe. Además la película nunca olvida el sentido del humor insertando instantes como la muerte de la momia, Cebao atacando a Drácula con una pizza de ajo o la momia escondiéndose en el armario de Eugene.

No se puede negar que el guión esconde varios agujeros, preguntas sin respuesta como el porqué Drácula sabe que Sean tiene el diario de Val Helsing, de dónde saca Drácula su peculiar coche o como puede darse la casualidad de que Sean consiga el diario de Val Helsing el mismo día que los monstruos se reúnen en su ciudad; son cosas que nunca se molestan en explicar. Además da la sensación de que todo acontece demasiado rápido (la película habría necesitado 5 ó 10 minutos más para explicar mejor la historia).

La historia nos sumerge en un mundo en el que los monstruos que siempre nos han asustado existen y quieren dominar el mundo y el peso de salvar a la humanidad recae sobre los hombres de unos niños, esa clase de mundo al que solían llevarnos las películas de los 80, cuando se realizaban películas de evasión divertidas, entretenidas y eficaces, la misma clase de película que es Una pandilla alucinante.
La película fue un inmerecido fracaso comercial en su momento, recaudando en los EE.UU. sólo 3.769.990 dólares. Su presupuesto fue de 12 millones de dólares.
Curiosidades:
Liam Neeson fue considerado para el papel de Drácula.
Jon Gries, que interpreta El hombre lobo en la película, también interpretó a un licántropo en Noche de miedo II (1988), que rodaría al año siguiente de Una pandilla alucinante.
Hay un póster de Nueva York bajo el terror de los zombis (1979) de Lucio Fulci en la casa árbol de los niños.
La actriz infantil Ashley Bank, que interpreta a la pequeña Phoebe, rechazó trabajar en Atracción fatal (1987) para participar en esta película.
El actor Dustin Diamond (el famoso Screech de Salvados por la campana) tenía un pequeño papel en la película, pero después fue cortado.
La foto que el monstruo de Frankenstein saca de la hermana de Patrick supuestamente desnuda es en realidad la foto de una chica rubia con una camiseta negra.
Según Fred Dekker se cortaron 13 minutos de película porque algunos ejecutivos no querían que ésta durase más de 90 minutos.
La película fue un inmerecido fracaso comercial en su momento, recaudando en los EE.UU. sólo 3.769.990 dólares. Su presupuesto fue de 12 millones de dólares.
Curiosidades:
Liam Neeson fue considerado para el papel de Drácula.
Jon Gries, que interpreta El hombre lobo en la película, también interpretó a un licántropo en Noche de miedo II (1988), que rodaría al año siguiente de Una pandilla alucinante.
Hay un póster de Nueva York bajo el terror de los zombis (1979) de Lucio Fulci en la casa árbol de los niños.
La actriz infantil Ashley Bank, que interpreta a la pequeña Phoebe, rechazó trabajar en Atracción fatal (1987) para participar en esta película.
El actor Dustin Diamond (el famoso Screech de Salvados por la campana) tenía un pequeño papel en la película, pero después fue cortado.
La foto que el monstruo de Frankenstein saca de la hermana de Patrick supuestamente desnuda es en realidad la foto de una chica rubia con una camiseta negra.
Según Fred Dekker se cortaron 13 minutos de película porque algunos ejecutivos no querían que ésta durase más de 90 minutos.
Publicar un comentario